Ashton Jeanty y Travis Hunter y Cam Ward acudieron a Indianápolis a cumplir con exámenes médicos. Shedeur Sanders lo dijo ‘desdenantes’ que él no iba a lanzar la pelota en el Combine de la NFL que se celebra por estos días.

Obvio, la comunidad que cree que la NFL es la religión número uno en el mundo ya les cayeron a palos en las redes sociales y los tachan de ‘ególatras’ ‘vanidosos’ y ya les auguran un rotundo fracaso en su carrera como jugador profesional.
Caray, ¿así de plano? ¿por no acudir a demostrar algo que ya demostraron? No voy a asumir un papel tipo Colin Kaepernick y comparar el Combine con la compra venta de esclavos. Vamos, bastantes dólares más ganan los deportistas de paga en comparación a las personas en esa condición en un muy pero muy vergonzoso pasado de la humanidad.
Hunter, ganador del Heisman… y si ha perdido su valioso tiempo con los textos del Cárdenas debe saberlo, para mi, pudo más el nombre de su entrenador en jefe de su equipo, Deion Sanders
El receptor abierto-defensive back en Colorado es un fuera de serie, pero Jeanty estuvo a 27 yardas terrestres de igualar la mayor cifra en la historia del futbol americano colegial. Es otro punto, pero lo quería mencionar.

Pero ya fuera de onda ¿qué más debe demostrar un jugadores de este cartel? En mi opinión, la NFL ha hecho su reunión anual tres semanas después del Super Bowl para seguir vigente en los medios. De inicios de febrero a fines de abril son tres meses sin dar la nota.
Y no mis amados puristas, un jugador colegial de ese nivel no mueve su selección en el Draft por no ir a Indianápolis a demostrar cuánto mide, qué tan rápido corre, su masa muscular… para conocer su manera de pensar no ocupan una demostración de habilidades físicas.
El Gran Robo
La verdad iba cerrar el espacio con el posible pase de Matthew Sttaford a los Raiders de Las Vegas pero… pues en eso estaba cuando vi la nota que se queda en los Carneros de Los Angeles, así que valió ‘babalú’
A cambio le tengo una sugerencia de la plataforma YouTube. Se llama The Great Brady Heist (El Gran Robo a Brady en el idioma de Octavio Paz) ya tiene tiempo publicado pero apenas lo miré… perdón

Relata aquél hecho en el que tras el Super Bowl LI, en Houston, cuando un reportero extrajo (o se robó) del vestidor de los Patriotas el jersey de Tom Brady tras derrotar a los Halcones luego de ir abajo 3-28
A alguien le pareció excelente idea atracarse el jersey y fue detectado por las cámaras y un mes después, días más días menos, FBI y autoridades mexicanas le cayeron en Atizapán, Estado de México, a las tres de la mañana.
Así es, el mexicano Mauricio Ortega, de La Prensa y que iba a los eventos en calidad de aficionado disfrazado de periodista fue el culpable. Al final le pide disculpas a Brady mismas que el ex quarterback acepta. Muchas gracias
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