*TOMADO DE EL DIARIO DE SONORA

René Cárdenas Andrade

El comisionado Rob Manfred mantiene su postura y desata las ilusiones, un equipo de Grandes Ligas en México.

Y se manejan sedes, que la Ciudad de México (ya no se llama Distrito Federal), Monterrey… otros hablan de Culiacán, Hermosillo, Mexicali, nombres sobran, pero, en serio, ¿poseemos una economía para tener un equipo así?

Si usted ha ido a un parque de Ligas Mayores, lo puede ver de inmediato en los precios. Bebida, comida, entradas, souvenirs… la enorme mayoría de la población no todos podemos solventar cervezas de ocho dólares (promedio), que duran como cuatro entradas (por el tamaño del vaso), boletos de acceso, baratitos, a diez dólares.

Y me dirá que en 1996 Padres y Mets tuvieron una buena respuesta en Monterrey, pero es bastante lejano apoyar tres juegos a apoyar 81. Sólo compare nuestro salario mínimo con el equivalente en Estados Unidos, es irrisorio el que se paga en nuestra nación.

Si tiene la propuesta de bajar precios, entonces, ¿cómo mantenemos salarios de los peloteros? Los pagos por derechos de televisión no lo son todo en Grandes Ligas.

Yo no sé si Rob Manfred sepa algo que yo no sé, o de plano le hace al condescendiente.

Y viene lo bueno, ¿quién va ser el guapo que le va entrar con la billetiza para poner en marcha esto? La NFL ha sido más prudente con ese asunto de tener equipo en México, pero a fechas recientes parece que les atrae más el estadio Wembley, que el Azteca, con todo y la fidelidad que nuestro país ha demostrado.

Apunta al bullpen

Ayer, otra salida infame de Shelby Miller. La segunda firma importante de los Diamondbacks de Arizona (importante en este caso significa ‘cara’) recibió varios dompes de leña de los Piratas de Pittsburgh.

Miller ahora tiene marca de 1-6 y antes de lanzar ayer tenía un promedio de limpias admitidas que parece su código postal (6.64). Su labor de este martes debe haberlo aumentado.

Trabajó cinco entradas con ocho hits y seis carreras y con Gigantes y Dodgers en la división, Arizona no tiene mucho espacio de maniobra para perder juegos.

¿Es hora de enviarlo al bullpen? Con todo y sus millones diría que sí y esperar que mejore…si es que se puede, pero mantener a Miller en la rotación de abridores parece una sentencia de derrota segura. Muchas gracias.

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