*TOMADO DE EL DIARIO DE SONORA

René Cárdenas Andrade

Aquí mire, vuelto lurio luego que los Gigantes de San Fancisco le acomodaron tres blanqueadas a los arrogantes y vomitivos Dodgers de Los Angeles en la serie de martes a jueves en la Bahía. Para cuando el terregal se disipó, los Gigantes amanecieron ayer a juego y medio de los Dodgers en la pelea por el Oeste de la Liga Nacional.

Pero no le hagamos mucho al ilusionista con la pelea por los banderines. Tampoco es una garantía de nada. Los mismos Gigantes, en 2014, fueron el quinto en la clasificación de la Nacional y acabaron por ganar la serie mundial a los Reales de Kansas City… otro wildcard. Pero la satisfacción está ahí.

Dejemos de lado las preferencias personales. Los Diamondbacks de Arizona llegaron ayer a Phoenix y hasta antes de jugar el primero ante los Cachorros de Chicago, ligaban cuatro triunfos… cuatro triunfos conseguidos nada menos que en el estadio de los Marlins de Miami y su nuevo mánager, Dan Jennings, bajado de la oficina a la caseta.

No era una situación que se esperara, Arizona llegó a Miami con otra racha de cuatro, pero de juegos perdidos luego de pasar por Filadelfia, pero ayer estaban a cinco juegos del liderato del Oeste, en buena parte debido también a la mencionada limpia sobre los líderes Dodgers.

Y Venezuela está presente en estos Diamondbacks que regresaban al Valle este viernes. Ender Inciarte y David Përalta estuvieron muy activos con el bat en la visita a Florida y con el equipo hasta el momento libre de lesiones, puede ser un foco que se enciende levemente… todo está en bajar los spikes al suelo y no pensar que con el uniforme puesto los rivales se van a espantar.

¿Los Rays?

Como quisiera saber qué pasa en Tampa Bay. Con su triunfo del jueves, 3-0 sobre los Atléticos de Oakland, los Rays, un equipo cuya nómina parece de Triple A, con un mánager que debuta como es Kevin Cash, resulta que es puntero en solitario en un sector en el que están las carteras de los Medias Rojas, los Yanquis, los Orioles y los Azulejos.

Podría decirme que Cash no viene de un club que haya sido arrasador. Hasta el año pasado era el coach de banca de los Indios de Cleveland, pero vea quién era su jefe, Terry Francona, quien guiara a los Medias Rojas de Boston a títulos de serie mundial en 2004 y 2007… falta que en Ohio lleve esa magia.

La historia no es nueva. Desde 2008, cuando los Rays alcanzaron su única serie mundial, perdida ante los Filis de Filadelfia, cada año pierden figuras. Es extraño que Evan Longoria siga en el equipo. En 2014 dejaron ir a su mejor lanzador, David Price, hoy con los Tigres de Detroit.

Los rays despertaron el viernes con medio juego de ventaja sobre los Yanquis y claro que se ha aprovechado que los Medias Rojas no carburan y tienen marca negativa (19-22) pese a su roster. Pero como siempre ocurre a estas alturas con estos equipos sorpresa, hay que aguardar a ver si Tampa Bay puede sostenerse más allá del Juego de Estrellas. Muchas gracias.

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